Trolls - El peligro de las marcas

Desde el principio de Internet, los trolls han existido. Usuarios que transmiten mensajes de odio hacia otros, escondiéndose en el anonimato de las redes sociales. Este problema, en los últimos años, ha empeorado.

Los trolls generan un gran impacto en las redes sociales y, sobre todo, afectan a los perfiles de influencers ya que se encuentran más expuestos, provocando un impacto muy negativo en su salud mental. Son comentarios de odios constantes que cambian la percepción del mundo de los usuarios que los reciben.

Estamos hablando de ciberbullying, un acoso continuo por redes sociales, a millones de usuarios en todo el mundo. Sin embargo, las empresas y las marcas, también están sufriendo las consecuencias de los trolls.

Para una marca, recibir este tipo de comentarios diarios puede convertirse en un elemento peligroso en relación con su imagen de marca y la percepción que los consumidores tienen de ella. La respuesta que deben dar las empresas ante estas situaciones no es fácil, deben luchar contra ellos pero sin caer a su nivel y responder con elegancia a estos ataques.

Cada vez, es más difícil para ellas separar el debate de sus consumidores acerca de sus productos o servicios de los comentarios de los trolls. EL 89% de las marcas, según un estudio reciente de We Are Social, afirma que borran o esconden comentarios que propagan el odio.

Según este estudio, las circunstancias no son las mismas y, atacar la identidad de una persona no es lo mismo que hacerlo contra la identidad de una marca. Por lo que, habría que replantearse cómo hacer las cosas y aprender a diferenciar usuarios descontentos de trolls.